lunes, 22 de junio de 2009
martes, 16 de junio de 2009
Sólo cuando estés bien con vos misma podrás estar bien con los demás, sólo cuando manejes tu soledad podrás manejar una relación, necesitas valorarte para valorar, quererte para querer, respetarte para respetar y aceptarte para aceptar, ya que nadie da lo que no tiene dentro de sí.
Ninguna relación te va a dar la paz que vos misma no creas en tu interior, ninguna relación te brindará la felicidad que vos misma no construyas, sólo podrás ser feliz con otra persona cuando seas capaz de decirle
bien convencida " no te necesito para ser feliz".
Sólo podrás amar siendo independiente, hasta el punto de no tener que manipular ni manejar a los que decís querer.
Solo se podrá ser feliz cuando dos personas felices se unen para compartir su felicidad, no para hacerse felices la una a la otra.
Para amar necesitas una humilde autosuficiencia, necesitas autoestima, y la práctica de una libertad responsable, pretender que otra personas nos haga felices y llenen todas nuestras expectativas, es una fantasía narcisista que solo trae frustraciones, por eso amate madura, y el día que puedas decirle a la otra persona "sin vos la paso bien", ese día estarás más preparada para vivir en pareja.
sábado, 6 de junio de 2009
lunes, 1 de junio de 2009

domingo, 24 de mayo de 2009
domingo, 17 de mayo de 2009
martes, 12 de mayo de 2009
miércoles, 25 de febrero de 2009
lunes, 23 de febrero de 2009
lunes, 16 de febrero de 2009
sábado, 14 de febrero de 2009
martes, 20 de enero de 2009
lunes, 5 de enero de 2009
domingo, 21 de diciembre de 2008

miércoles, 17 de diciembre de 2008
Anoche soñé con esa persona que creía que era. Me llamaba y no la reconocía, o ¿no quería reconocerla? Me preguntaba como estaba, como si todo estuviera normal. Le contestaba igual, sabiendo que no era así. Me preguntaba qué me pasaba con su persona, le contestaba que era yo la que debía preguntar eso, se quedaba en silencio. Me confesaba que realmente me extrañaba y que no quería seguir así, no le hacía bien. Me daba a entender que había errores y errores, muy diferentes unos de otros, algunos pequeños que dolían menos y otros más grandes que quizás dolían más pero al fin y al cabo todos duelen. A veces lastiman a varias personas y a veces a una sola o a nadie, a veces podían perdonarse y a veces se creía que no, a veces había que detenerse a pensar en ellos y a veces era mejor dejarlos pasar. Además, me admitía que había cometido algunos sin darse cuenta y debía aceptarlo. Creí que pretendía que yo también los admitiría pero no hizo falta decirlo, no era muy importante. Luego desperté. Como siempre creyendo e ilusionándome de que todo eso había sido real, pero era obvio que no. No sabe lo que siento, ni sentí. Realmente me demostró que no le preocupa y me di cuenta de que a mi tampoco debía importarme. Por eso, estoy intentándolo y creo que a punto de lograrlo.